estudiarEsta lección la aprendí, claramente, cuando tenia 30 años. Había regresado al Ecuador luego de mi segunda etapa de estudios y, al inicio, vivía con mis padres. Esperé al momento preciso para poder vivir sola nuevamente. Aunque me criaron lo mejor que pudieron, salí a estudiar lejos de casa cuando tenía 17 años y eso me permitió descubrir otro mundo. Aquellos años de estudio pude experimentar lo que yo podía ser sin la tutela de papá ni mamá. Fui encontrando formas diferentes de hacer las cosas y, poco a poco, fui encontrando mi estilo y mis gustos sin influencias. A los 22 años de edad regresé y viví, en casa de mis padres, como un año. De ahí salí vivir sola y fue genial. Aún así estaba siempre sujeta a la autoridad de ellos. Vístete así, come bien, pórtate bien, no digas esas cosas, no cruces la pierna, peinate, maquillate, y asi sucesivamente. Esto a mi me molestaba la mayor parte del tiempo y, algunas veces, reaccionaba respondiendo, otras llorando y otras callada para evitar problemas, pero siempre me hervía la sangre que me sigan diciendo cómo tengo que comportarme. Entendía que lo hacían porque deseaban lo mejor para mí. Pero, tal y como han sido las generaciones anteriores y lo siguen siendo, en gran parte, las nuevas, era evidente que no entendían que, lo bueno para mi, no necesariamente era lo mejor para ellos y no me interesaba ser a imagen y semejanza de ellos porque sabía que había algo propio que tenía que descubrir. Aunque siempre estuve, de alguna manera, en sintonía con esa voz interior, tanta bulla e influencia externa con frecuencia opacaban ese contacto interno. Por suerte o dharma, siempre me gusto cultivar los momentos a solas, me gustaba mucho contemplar las estrellas y estar en la naturaleza. Eso fue lo que más me ayudo a estar en contacto con la energía del alma, sobretodo porque desde pequeña tuve experiencias inusuales, desdoblamientos, percepciones de mundos no físicos y eso marcó muchisimo mi silencioso camino.

massaggioA los 28 años volví a irme del país para estudiar una nueva carrera, aquella de la medicina alternativa. Estuve otros 2 años y un poco más afuera y esta vez sí que fueron de los años más intensos y transformadores. Al regresar, viví otra vez con mis padres hasta encontrar el espacio para hacerlo sola. Ahí fue cuando conocí al «maestro» del que escribo en mi segundo libro «De la Oscuridad a la Luz«. Recuerdo que iba a su consultorio a que me haga acupuntura y lloraba en silencio, con alguna frecuencia, porque mamá estaba encima mío en todo con lo mismo de antes. Ahora yo ya estaba mucho más afilada y sostenida en mis propios gustos y todos se contraponían a mi mamá. Desde mi vestimenta hasta mi forma de comer. Así que vivía peleando con ella, diciéndole que era mi vida y que no intervenga. Lo mismo pasaba con papá pero en menor intensidad. Así que oscuridad_luzno encontraba una manera de que me dejen en paz y que me respeten con mis cambios. Un buen día el «maestro» me dijo que quería hablar conmigo. Imaginé que él se había percatado de mi llanto. Así que acepté conversar con él. Esperaba que me pregunte qué me pasaba pero apenas creo que me escuchó unos 30 segundos y, luego, me dijo, quizás, la cosa más sabia que vino de él hacia mí. Me dijo: «si supieras quién eres de verdad, no tendrías la necesidad de estar respondiendo ni peleando.» En ese momento fue como una revelación. Aunque las palabras sonaban acertadas, no eran las palabras sino su contenido y la intención con las que fueron transmitidas. Obviamente, ¡es así! Si yo supiera quien soy, no me importaría lo que nadie piense de mí. No tendría que ponerme a discutir con mis padres para que ellos entiendan lo que soy ni tendría que defenderme de lo que sea que me acusen porque, evidentemente, cada quien tiene una perspectiva diferente de las cosas y no puedo esperar que vean como yo veo las cosas ni entiendan lo que he entendido yo. Mi vida ha tenido una trayectoria que me ha construido tal y como he querido y tal y como acordé antes de encarnar. He ido soltando, con los años, la mayor cantidad de condicionamiento y me he sentido libre para escoger lo que he querido ser y hacer a pesar de que pueda ir en contra de los gustos de muchas personas cercanas e importantes para mí. He aprendido a quererme, a reconocer las debilidades, a dejarlas ser y a trabajar con ellas en la medida de la necesidad para irme fortaleciendo. Tengo tanto por hacer conmigo misma que, una vida, no me bastará pero, al menos, considero que la estoy aprovechando bien. Estoy lejos de estar en el punto que deseo, pero no me genera ansiedad porque sé que estoy en el camino.

futbol matchboxLiberarse de tantas trabas sociales, de la imagen, de la dependencia, del deseo de ser aceptada, amada tal y como soy, ha sido un camino duro. Romperse en mil pedazos para luego reconstruirse es una tremenda tarea. Aunque he sido, relativamente, desprendida de estas necesidades, también las he tenido y las sigo teniendo. Mi adolescencia fue muy tranquila, introspectiva, y siempre sintiendome extraña en la sociedad por hacer cosas que me gustaban que, en esa época, no eran bien vistas socialmente. Jugaba futbol, vivía subida en árboles y tapiales, no me gustaban las muñecas sino los carros matchbox de mi hermano mayor, les ganaba a los hombres jugando canicas y era mejor que muchos de ellos en los deportes. A pesar de que tenía un costo social, no tuve reparo en pagarlo porque era más feliz haciendo lo que me gustaba así esté en contra de la visión social de cómo debía ser una mujer. Si bien me gustaba el tiempo a solas, también me sentía sola porque no encajaba en ningún lugar. El deseo de ser aceptada y de encajar no fue lo suficientemente fuerte como para sacarme de mi devoción por jugar futbol. Ahora en cambio, raro es que no haya una mujer que no juegue futbol. Increíble cómo puede cambiar algo tan arraigado con el pasar del tiempo. Es una buena señal de que sí puede cambiar nuestra sociedad.

Quizás te preguntes por qué habría uno de romper en mil pedazos las cosas que nos enseñaron en el colegio o en la casa y que consideramos que son buenas. Pues, es una cosa haber aprendido algo a través de la repetición verbal o hasta del ejemplo, entender que algo es bueno porque se supone que es bueno, pero sin entender su fondo. Por ejemplo, podemos pensar en el tema de la integridad. Nos han enseñado que hay que ser íntegros, honestos, buenos, pero pocos habrán aprendido de una manera en que estos conceptos se han entendido con total claridad. Por total claridad no me refiero a entender algo de manera conceptual sino de haber entendido, a través de una disección de cada principio, cosa que esté realmente integrado en la psique, esté integrado en el diario vivir en que se vive, automáticamente, con los principios después de entenderlos minuciosamente. Eso no es como lo aprendemos y, por eso, se convierten en cosas que repetimos pero que no tienen un verdadero fondo. Hacer este proceso minucioso es fundamental para encontrarse con uno mismo, para saber quién se es y para tener claro el propio panorama, de tal manera que ya no hay la dependencia de lo que otros digan.

Cuando recibí esa enseñanza de aquel «maestro» parece que estaba lista para entender la sabiduría en el concepto. Me quedé en contemplación por largo rato hasta asimilarlo y, luego, empecé un proceso en el que me enfoqué en respetarme a mi misma. No dije nada a mis padres pero, en la medida en que yo cambiaba, ellos dejaron de molestarme. Ahí volví a considerar la forma en que los humanos emanamos una energía que genera reacciones del entorno, muchas veces, para reflejarnos lo que necesitamos trabajar. Pero, no vemos lo que sucede, en nuestra vida, como un reflejo de nuestra propia emanación. Lo vemos como algo circunstancial pero no es así. Esto es algo duro de aprender y de asimilar. Cuando lo consideramos, obligadamente vamos aprendiendo a ser responsables de lo que nos sucede. Descifrar como esto se da es mágico y la observación es la mejor forma para descubrir este mecanismo de resonancia y de vibración. Lo podemos entender, científicamente, desde la perspectiva de la física cuántica en adelante.

radio youtubeEs poco fácil dejar de depender del impacto que otros tienen en nosotros porque tenemos muy arraigada esa necesidad de ser aceptados y amados. Pero, el rato que lo empezamos a trabajar, no es que eso se va sino que deja de tener el mismo poder. He tenido la oportunidad para darme cuenta del impacto que todavía tiene cuando alguien me trata mal o dice cosas desagradables de mi aún sin conocerme, sobre todo insultosa través del canal de la radio en Youtube, en donde me han dicho desde las cosas más lindas hasta las más feas. No es para nada agradable leer insultos de otros que ni me conocen pero que así les parece lo que escuchan o ven en los videos. Al principio me quedaba boquiabierta y congelada, pero de ahí, permitía que entre la mente abierta, la conexión conmigo misma y esos comentarios finalmente resbalan. Notar el proceso que paso cuando eso sucede me permite reconocer cuánto voy caminando en la integración de esa enseñanza y eso que ya han pasado 20 años desde que me impacto.  Igualmente aprobacionsucede con los elogios. Si bien son más agradables, caer en la dependencia de los mismos es caer en la rueda de la dependencia que dista de la claridad sobre uno mismo. El elogio, normalmente, es recibido por el ego que es quien tiene la necesidad de ser aceptado y amado. El rechazo también afecta al ego por los mismos motivos. Finalmente, mientras no podamos vernos de alma a alma, lo que hacemos es interactuar de persona a persona y lo que hacemos es proyectar en el otro algún aspecto que tiene resonancia con uno mismo. Nadie ve el mismo video o lee el mismo artículo de la misma manera. A una persona le llegará más una cosa, a otra le llegará más otra. Cada quien recibe aquello para lo que está listo al momento de interactuar con el contenido ofrecido. Entonces, cada quien reaccionará de una manera diferente. Y, por una lado, está bien, es parte del proceso individual. No es gratuito que te haya interesado el titulo del artículo y que hayas llegado a este punto. Alguna resonancia hubo y esto estimulará una reacción en función de aquello con lo que te identifiques.

Esto que menciono de lo selectivos que somos cuando recibimos información se aplica a una conversación, se aplica a lo que lee uno cuando estudia, cuando lee un libro y así sucesivamente. De pronto leemos algo que nos llega más. De pronto entendemos algo cuando escuchamos ciertas palabras construidas de cierta manera.  Eso es inevitable. Aún en el proceso de iluminación, cuando Maestros iluminados ofrecen sus enseñanzas, llegan a unos de una manera y a otros de otra manera. Cuando llega el momento preciso un discípulo se ilumina con la palabra más insólita. Y eso es lo que hace del camino individual algo tan único y especial. Con frecuencia me ha sucedido que me da mucha frustración cuando estoy en contacto con» mi amada tórtola» porque veo tantas cosas, sugiero tantas otras para apoyarle en su proceso pero, con frecuencia siento que estoy hablando al aire, él no escucha, no puede escuchar porque no está preparado para todo lo que puedo ofrecerle. Así que me genera mucha frustración porque yo soy la que tiene prisa de que él se dé cuenta de tantas cosas, pero no es así para él. Vaya que eso me está enseñando paciencia y, sobre todo, el desprendimiento. Él es duro en aprender a verse a si mismo tanto como lo soy yo en desprenderme de él y en aprender la paciencia. Encuentro tranquilidad cuando vuelvo a ese punto que trasciende espacio y tiempo con el que, lastimosamente, no vivo las 24 horas del día. Y así, en este camino que recorre muchos senderos, sigo aprendiendo sobre quién soy, fortaleciendo esa conexión que va más allá de la vida en esta tercera dimensión, sometida a la dualidad, a la incertidumbre, y a todos esos aspectos de nuestra vida social que nos hacen crear una idea sobre lo que somos que puede o no estar muy cercana a nuestra verdadera vibración esencial. La única manera de cerciorarnos es pasar de sostener algo porque nos han enseñado, a vivirlo haciendo un cuidadoso discernimiento y una gran disección de cada pensamiento, idea, sentimiento, principio… ¡Un viaje para divertirse y pasar bien ocupados!

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17 comentarios
  1. Es lo que necesito leer para aceptar y entender muchas cosas en mi alrededor

  2. Gracias por campartir

  3. Que dificil es pasar de los que nos han programado, a vivirlo individualmente….tus palabras me llegaron en el momento preciso…me hacen ver que a mi edad estoy en «pañales»…gracias por lo que tu compartes…que la divinidad de bendiga.

  4. Muy interesante.

  5. Hola Goy. En este momento me está sucediendo lo mismo con mis dos hijos de 32 años y 24 años las discusiones son muy frecuentes, el mensaje que tú das es precisamente el que voy a aplicarlo , pero que duro es, desprenderse de los hijos y dejar que vivan su vida. !! Hay que acordarse cuando uno era ternero !!!!. Gracias Goy.

  6. Una mejor manera de conocerse a uno mismo es tener una contraparte que te afirme o niegue aquello que tú piensas o sientes que eres. A nivel meramente humano esto es muy, muy difícil y entiendo el gran tiempo y la inmensa lucha que has tenido. En mi caso inicié este proceso a los doce años, mi contraparte para conocerme a mí mismo ha sido Dios encarnado, Jesucristo. Primero soy ser humano lleno de limitaciones (pecador) Luego soy redimido de esta condición por el sacrificio de Cristo en la cruz, en beneficio mío. Tercero, no he dejado de ser pecador peor he aprendido a amarme, amar a Dios y al prójimo. Cuarto, desde el comienzo, (doce años), dejó de importarme la opinión ajena. Quinto, aprendí a respetarme y respetar a toda persona, Cristo me ha dado suficiente amor eterno y real para compartirlo con todos. El es el creador y sustentador del universo, de la energía de los quantums, de la materia, del amor, de la bondad, de la constancia, del perdón, de la esperanza que son las energías que atraen a otros y otras personas para vivir con uno mismo y con otras personas en felicidad permanente. Perdona el sermón, pero es lo que soy, siento, creo y practico, por eso te escribo. !Felicidades. Sigue adelante!.

  7. ¡¡¡ Excelente artículo !!!

    Me siento muy identificado con lo expuesto en éste tema. En el camino de ser yo mismo, de ser fiel y leal a mi verdad interior, ha dejado tras de si una serie de rupturas, abandonos y renuncias. Descubrí que escuchar y seguir mi verdad interior discrepaba, en la mayoría de las veces, a las expectativas y demandas de los demás, en especial, de las personas cercanas a mi.

    Cuando era mas sincero y honesto conmigo mismo, siendo fiel a los dictados de mi corazón y mi ser, sentía como la familia, colegas y amigos cercanos no eran compatibles conmigo y, tratar de justificarme o explicarme, era como darle más poder e importancia a su opiniones y a la aceptación por parte de ellos. Más aún, mientras mejor me sentía conmigo, más rechazo y oposición sentía por parte de ellos, ¡ que ironía !, y se suponía que eran ellos los que «más me querían» o «los que más deseaban mi bienestar»,…. FALSO !!!!

    A raíz de esto, tuve la necesidad de distanciarme de mi familia, colegas y amistades del pasado y, de verdad verdad, hoy en día soy más autentico, más sincero y espontáneo. Sinceramente, me cansé de vivir con «caretas o máscaras». Abandone una carrera profesional con la que nunca me identifique, me divorcié de alguien a la que nunca amé y, abandone amistades que eran dañinas o, simplemente, ya no «vibraban» conmigo. ¡ Que alivio !, poder quitarse cargas sin miedo ni culpa. Por cierto, muchísimas personas tratan de meterte miedo y culpa para que no hagas los cambios que tu corazón te está pidiendo a gritos.

    Me volví a enamorar y me volví a casar y, mi vida ahora es muy simple y sencilla pero, irónicamente, la siento más profunda y significativa, aun cuando estoy conciente que no es la versión final, de TODO lo que mi alma y mi corazón aspiran de mi.

    Descubrí también en éste proceso que, los estándares y valores de «éxito y felicidad» que el mundo y la sociedad nos enseñan, no concuerdan ni resuenan con los dictados de mi corazón.

    Felicitaciones por tu web GOY…!

    Besos y abrazos…!

    Mariano

  8. Me encantó tu historia, yo viví también algo similar, siempre es un placer leerte. Abrazos y bendiciones

    • Me parece un tema sumamente interesante, y me siento identificada.

  9. Excelente artículo Goy, siempre aprendo mucho. Gracias.

  10. Hola Goy, que bueno leerte. ¡Felicidades por tu blog! Te leo y mientras te leo pienso en lo importante que es escucharse para conocerse. Pero y lo difícil que es escucharse…. porque mas que escucharnos yo diria que nos hablamos y en ese dialogo interior a menudo somos un poco duros con nosotros mismos. Demasiados «ahora no puedo» «quizás más adelante». El miedo al error, nos paraliza. El ridículo, el rechazo o la vergüenza son algunas de las excusas para dejar para mas adelante el prestarse la atención que uno merece. ¿Cuántas cosas que no decimos? ¿Cuántas callamos? Y asi, si no escuchamos lo que no decimos ¿cómo vamos a decir lo que pensamos? La realidad exterior no debe ser ajena a lo que llevamos dentro. Al leerte entiendo que debemos escucharnos para conocernos, conocernos para poder confiar en nosotros mismos. Hemos de arriegarnos y salir de la rutina, atrevernos a explorar territorios inciertos. Hemos de explorar para comprender, comprender para aprender, aprender para vivir conscientes. Vivir conscientes para disfrutar de nosotros con nosotros y de nosotros con los demás. Vivir conscientes, saber quién somos y como bien dices, no tener que explicarnos a los demás.

    • Somos de acuerdo a lo que pensamos y actuamos de nosotros mismos, o lo que nos dicen otros por decreto y hasta con nuestras propias palabras, porque todo esta en nuestra mente.Pablo dijo somos transformados x la revelación de nuestra mente. Cada vez que te encuentres diciendo una frase negativa, sabrás que clase de concepto arraigado tienes en el subconsiente, sabrás que clase de sentimiento obedece¨: amor o samor,bórralo destrúyelo, niégalo,sino quires seguir manife
      .ando en el exterior. Has esta práctica notarás que tu hablar es otro. Tú modo de pensar es otro. Tú y tú vida se estarántransformando por la renovación de la mente.

  11. Estoy totalmente de acuerdo con lo de la resonancia…ya que, todas las veces que he leído tus artículos me ha pasado eso. Los he leído unicamente cuando el tema me llama la atención y lo llego a terminar por completo. Mientras que otras veces comienzo a leer y me desconecto porque no tiene impacto para mi en ese momento.
    En cuanto al tema de conocerse a uno mismo…es fácil describirse a uno mismo de palabras para afuera, incluso decir la parte física. Pero, saber quien realmente eres solo lo puedes decir con total convicción cuando has hecho un viaje por tu interior y como observador; dejando de lado emociones y pensamientos…solo viendo la esencia. Para mi, si es un trabajo aun largo de realizar.
    Pero, poco a poco conforme me voy ejercitando en este aspecto tengo la certeza, que el conocerme a mi mismo internamente me va permitiendo saber quién soy para mi y eso me da seguridad para no depender de la opinión del resto.

  12. Hola Goy, gracias por tus articulos.
    A mi actualmente me llega una inseguridad tremenda de que si los cambios que estoy dando a mi vida son los correctos ya que a veces me siento rara porque la mayoría de la gente cercana tiene otro tipo de gustos, por esto a veces discrepo conmigo misma y me entra la duda de que si la equivocada soy yo o el resto… Estos cambios creo que nos llevan a tener una vida mas solitaria.

    Saludos 🙂

    • Entiendo lo que dices, Gabriela. Lo que te puedo decir es que, primero, los cambios necesitan realizarse si tu estás haciéndolos porque tu corazón te lleva por ahí y no estás viendo en los demás para hacerlos. De ahí, es verdad que te alejas de la gente con la que no puedes compartir tus cambios, pero también es verdad que aparecen nuevas personas en tu vida que estan resonado con esos cambios. Lo mejor es mantenerse abierta y reconocer con quien puedes y con quien no puedes compartir tu nueva aventura. Eso no implica que no vuelvas a ver o estar con las personas de tu pasado, mas aun si son cercanas o se trata de tu familia. Se trata de saber qué compartir con cada grupo de personas. Enfócate en ti misma y tu proceso de cambio para que lo hagas porque estás convencida, no porque es algo que otros consideran necesario para ti…. Como consecuencia, no sentiras reparo en haberlo hecho. un abrazo

  13. Que bonito ……..

  14. Goy siempre tus palabras llegan a mi en momentos precisos, gracias x compartir tus experiencias y sabiduría , d corazón mil gracias =} .

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