¿Por qué no salimos del círculo vicioso de la corrupción? ¿Cuál es la diferencia con países que han logrado estabilidad social y económica? ¿Qué necesita suceder para que se logre un cambio auténtico? ¿Cuál es la base del problema?
Las preguntas se pueden seguir sumando sin encontrar una respuesta que nos saque de esta situación porque las mentes humanas están hechas para pensar en sí mismas primero y por encima de todo. Encontrar treguas requiere un proceso avanzado de personas con visión para ver y determinar, en función de esa visión, el mejor camino para la comunidad. Aunque la creación de un nuevo mundo pueda sonar utópico, considero que eso se hace en un proceso lento que puede tomar siglos. Cada generación está encargada de generar una visión que se encamine en una cierta dirección hasta que eso se pueda manifestar. Si nos diéramos cuenta de que somos los sembradores de un futuro diferente empezaríamos a crear la visión y a educar compartiendo las posibilidades hasta que la fuerza colectiva sea lo suficientemente fuerte como para que se manifieste esa realidad.
Empezaré la visión insistiendo en que la estructura política, económica, religiosa y cualquier estructura piramidal en que nos veamos inclinados a entregar el poder a un grupo minoritario no es ni funcional ni saludable para el ser humano consciente que desee vivir en paz y armonía dentro de una sociedad justa y transparente. Estas estructuras están diseñadas para estimular aspectos de nuestra humanidad que nos acercan más al reino del embrutecimiento en vez de acercarnos al reino de la iluminación. Los humanos siempre estaremos expuestos a la dualidad de nuestro Universo. Esto quiere decir que nuestro lado oscuro gobernado por el miedo, la codicia, la envidia, el celo, la avaricia, el egocentrismo, la maldad y así sucesivamente, siempre estará presente en nuestras opciones de existencia tanto como el lado de luz, gobernado por el altruismo, la bondad, la compasión, el amor, la confianza, el respeto, la transparencia. Estos dos lados son parte de nuestra humanidad. Cada estructura que se cree tendrá la capacidad de estimular más uno de los lados. Pues, entendamos entonces, que la estructura piramidal de pocos líderes en el poder y los demás ciudadanos en el sometimiento de estos líderes, es el tipo de estructura que fomenta, por encima de todo, el lado oscuro del ser humano. Viendo objetivamente la historia común de los últimos siglos, ¿alguien es capaz de dudar de este punto de vista? Claro, aparentemente no tenemos el otro punto de referencia porque no hay registros masivos de una era altruista y de liderazgo horizontal en que, seguramente, existieron muchos líderes que guiaban a una sociedad. Se me ocurre el sistema de los antiguos nativos en que tenían un jefe, un sabio, un guerrero, un shaman, un artista y otro tipo de líderes que tomaban decisiones mancomunadas. Eran sociedades más pequeñas y manejables. Sin embargo, no veo por qué no puede suceder algo similar con líderes sectoriales que tengan un mismo nivel de importancia. Los líderes que surjan por su propia naturaleza, necesitan ser guiados y preparados para manejar los temas en los que su naturaleza pueda canalizarse. Entonces, se necesita la gente que está detrás de los líderes y los prepara y así, cada persona puede encontrar su forma de participar y aportar en su mundo. Hoy por hoy las cosas por poco y funcionan bajo normas impositivas con la visión de la economía caudalosa para vivir bien. Algo ahí no tiene equilibrio. No se trata de no tener el deseo de vivir bien, se trata de aprender a vivir bien y consciente de nuestro impacto en el mundo.
Salir de los sistemas que nos tienen atrapados a la mayoría no es una tarea fácil. Sin embargo, existe ya un movimiento de energía que está llevando a la gente a buscar alternativas. Por ahora, estos movimientos están dispersos y funcionan aisladamente. De una u otra manera todavía son impactados por la fuerza de la colectividad. Sin embargo, así se empieza a generar un cambio que algún rato tendrá más fuerza y podrá adaptarse a las circunstancias que presente el despertar de la conciencia de la colectividad. Igualmente, la existencia sucede en ciclos y el ciclo de vivir conscientemente y de otra manera tendrá su tiempo y volveremos a dar vueltas como las estaciones. Así es el movimiento de los tiempos en el Universo.
Hemos escogido venir en una época complicada porque nos permite la mayor posibilidad de despertar nuestra conciencia a otros niveles que no podrían estimularse como en estos tiempos. El cambio no es fácil ni se dará en pocos años. Necesitamos tener una visión del impacto de lo que hacemos ahora en futuras generaciones. Necesitamos aprovechar la oscuridad del mundo para sacar nuestra luz con la fuerza suficiente para anclar una nueva manera de vivir con los aspectos de luz que, en el fondo, la mayoría queremos lograr. Los monstruos oscuros de nuestra conciencia siempre estarán presenten, pero podemos aprender a vivir por encima de ellos, sometiendo su impulso y creando estructuras nuevas que estimulen lo que tanto anhelamos. Esa nueva estructura no puede estar a cargo de una persona, no puede tener una forma piramidal, no puede estimular la pereza ni la irresponsabilidad individual. Notemos que, en gran parte, es por gran pereza que entregamos el poder a terceros. Eso tiene un costo muy alto. Es la pereza de la conciencia la que nos ata a la oscuridad. Así que, por eso, necesitamos anclar en nuestras vidas aquello que deseamos ver manifestado. Es la manera de encontrar el camino para inculcar una nueva visión en las generaciones por venir.
¿Estás list@ para un cambio? ¿Qué cambios que rompen este sistema disfuncional estás dispuesto a lograr en tu vida? Piensa en tus relaciones más íntimas, las relaciones con los amigos, la sociedad. Empieza por ahí antes de pensar en los cambios grandes. Romper el sistema actual implica revisar todo lo que estamos acostumbrados y pensamos que así es porque así lo aprendimos y es lo único que conocemos. Implica aprender a pensar por uno mismo y empezar a reunirse con personas que apoyen el proceso para que se vaya fortaleciendo. Date cuenta de por qué escogiste venir en estas épocas y encuentra tu aporte para el mundo nuevo que se está apenas gestando. Aprovecha la oportunidad única que tienes, en estos tiempos, para despertar la conciencia.
Gracias por considerar este artículo. Te invitamos a que lo compartas y que inicies el proceso de cambio en ti y te reúnas con personas que resuenen con tu proceso. A continuación el programa, con Michelle Oquendo Sanchez en Desde Mi Visión y el segmento Crecimiento Interior.
Hola Goy, es un muy buen tema de reflexión. Desde mi punto de vista todo esto pasa por el tema de la conciencia, del crecimiento de cada uno de nosotros, de hacernos responsables de nuestras vidas.
Es un tema apasionante, te felicito por traerlo al tapete.
Es muy bueno este articulo, el cambio debe comenzar en nosotros mismo, con el ejemplo puede cambiar la sociedad
GENIAL!!! …. gracias por darnos este gran artículo!!!…pues en estos momentos es justo y necesario!!! jajjajaj….Como siempre querida Goy tan acertada!!! y pragmática…. Muchas gracias lluvia de BENDICIONES con amor g
Excelente artículo!!!
Hola como estas!
Como siempre Goy querida! es un placer leerte! siempre enviando artículos muy buenos!!! que este 2017 te traiga lo más lindo de esta vida:SALUD AMOR PAZ LUZ Y MUCHA FELICIDAD!! QUE CADA DÍA SEA LLENO DE MUCHAS BENDICIONES JUNTO A TODOS TUS SERES QUERIDOS!!
Un fuerte abrazo desde Uruguay!
Gerson.
Gracias, Gerson, por tus palabras y acompañar en el camino. Un abrazo fuerte para ti también.
hola !!
es interesante lo que he leido, creo que el cambio viene desde adentro, de cada uno, independientemente de la marea que te lleva hacia uno u otro lado, dejarnos iluminar por esa luz que todos tenemos y ser difusores de esa luz, que en realidad no es sino AMOR…entonces damos el gran salto…para esto que importante es hacer silencio y escuchar solo a nuestro ser interior..
abrazo!!
Hola Goy
Considero que el mundo se salvará o condenará por su propia inercia, es decir nadie puede cambiar al mundo. Lo que si podemos hacer hacer es cambiar nuestro mundo, el de cada uno, con el cambio de las creencias y la percepción que tiene cada ser humano, esto llevará a una modificación de la energía colectiva o al menos el cambio de mi mundo.
Al final vivimos nuestra existencia entender que las coincidencias no existen y las cosas suceden por resonancia, y cada uno es responsable de lo que vive, porque es lo que atrae.
Un abrazo